jueves, enero 29, 2009

Fernando Pessoa / Tres poemas

Lidia, ignoramos...

Lidia, ignoramos. Somos extranjeros
Dondequiera que estemos.

Lidia, ignoramos. Somos extranjeros
Dondequiera moremos. Todo es ajeno
Y no habla nuestra lengua.
Hagamos de nosotros el retiro
Donde escondernos, tímidos por el insulto
Del tumulto del mundo-
¿Qué quiere el amor más que no ser de otros?
Como un secreto dicho en los misterios
Sea sagrado por nuestro.

Severo narro...

Severo narro. Cuanto siento, pienso.
Palabras son ideas.
Murmullos, el río pasa y lo que no pasa
Es nuestro, no del río.
Así quisiera el verso: mío y ajeno.
Y por mí mismo leído.

Ricardo Reis


Los antiguos invocaban a las Musas...

Los antiguos invocaban a las Musas.
Nosotros nos invocamos a nosotros mismos.
No sé si las musas aparecían
-Sería sin duda conforme a lo invocado y a la invocación-.
Pero sé que nosotros no aparecemos.
Cuántas veces me he asomado
Sobre el pozo que imagino
Y balado "¡Ah!" para oír un eco,
Y no he oído más que lo visto:
La vaga claridad oscura con que el agua resplandece
Allá en la inutilidad del fondo...
Ningún eco para mí...
Sólo vagamente un rostro,
Que debe ser mío por no poder ser de otro.
Es una cosa casi invisble,
Excepto lo que luminosamente veo
Allá en el fondo...
En el silencio y la luz del fondo...

¡Qué Musa!...

Alvaro de Campos

Fernando Pessoa (Lisboa 1888-1935), Poemas. Versiones de Rodolfo Alonso, Compañía General Fabril Editora, Buenos Aires, 1972


Lídia, ignoramos..
Lídia, ignoramos. Somos estrangeiros /Onde que quer que estejamos. //Lídia, ignoramos. Somos estrangeiros /Onde quer que moremos, tudo é alheio /Nem fala língua nossa. /Façamos de nós mesmos o retiro /Onde esconder-nos, tímidos do insulto /Do tumulto do mundo./Que quer o amor mais que não ser dos outros? /Como um segredo dito nos mistérios, /Seja sacro por nosso.

Severo narro...
Severo narro. Quanto sinto, penso. /Palavras são idéias. /Múrmuro, o rio passa, e o que não passa, /Que é nosso, não do rio. /Assim quisesse o verso: meu e alheio /E por mim mesmo lido.

Os antigos...
Os antigos invocavam as Musas./Nós invocamo-nos a nós mesmos. /Não sei se as Musas apareciam — /Seria sem dúvida conforme o invocado e a invocação. — /Mas sei que nós não aparecemos. /Quantas vezes me tenho debruçado /Sobre o poço que me suponho /E balido "Ah!" para ouvir um eco, /E não tenho ouvido mais que o visto — /O vago alvor escuro com que a água resplandece /Lá na inutilidade do fundo... /Nenhum eco para mim... /Só vagamente uma cara, /Que deve ser a minha, por não poder ser de outro. /E uma coisa quase invisível, /Exceto como luminosamente vejo /Lá no fundo.../No silêncio e na luz falsa do fundo... // Que Musa!...

---
Foto: Fernando Pessoa (a la derecha) juega ajedrez con Aleister Crowle (sin información de fecha y lugar). The Independent, Londres

3 comentarios:

  1. Lo grandioso de Pessoa es cómo sabe componer el personaje Reis. Don Fernando jamás podría haber escrito esto: "Así quisiera el verso: mío y ajeno.
    Y por mí mismo leído". Sólo Reis.

    ResponderBorrar
  2. Altísima poesía estás publicando, Aulicino.
    Los poemas de Pessoa son EXTRAORDINARIOS y no los conocía o no los recordaba.

    "Los antiguos invocaban a las musas/nosotros nos invocamos a nosotros mismos...y no aparecemos". El gran Álvaro de Campos y su dolorosa metafísica.

    Y la "idea" de Reis, la de no pertenecer a ninguna tierra, ser un exiliado hasta de sí mismo, tan autobiográfica de Pessoa -él mismo-, no? Sin embargo, a diferencia de su "creador", Reis todavía cree en el amor...
    Y algunas imágenes que te parten la cabeza:
    "el río pasa y lo que no pasa es nuestro"
    ¿Y para qué vamos a hablar de Il miglior fabbro...CAPO!!! Ahhh...pase lo que pase, gracias, Jorge

    ResponderBorrar
  3. El poema de Alvaro Campos me recordó el de Frost "For Once, Then Something": Once, when trying with chin against a well-curb,/I discerned, as I thought, beyond the picture,/Through the picture, a something white, uncertain,/ Something more of the depths--and then I lost it./Water came to rebuke the too clear water./ One drop fell from a fern, and lo, a ripple/Shook whatever it was lay there at bottom,/Blurred it, blotted it out. What was that whiteness?/Truth? A pebble of quartz? For once, then, something

    ResponderBorrar