viernes, noviembre 16, 2007

Dunia es...


Dunia

Dunias son las sonrisas que intercambian,
bobalicones, los enamorados,
dunia es la flor que no se mira nunca,
y es dunia también la sonrisa
de un recién nacido.

Dunia es el color de todo lo inmaterial,
es el color de la ausencia,
el color de los adioses
y el color con que la música y la poesía
se presentan cuando echan la casa por la ventana.
La piel de un potrillo o de un becerro
de tres días es dunia intenso,
lo mismo que las perlas en embrión,
las estrellas que no se ven desde la Tierra,
los pétalos no abiertos de las flores
y los ojos de los niños que duermen
en el claustro materno.

Lo no tocado todavía es dunia,
como la atmósfera de los espejismos
y las plumas de los pájaros
que oímos cantar pero no vemos.

Los lagos y los ríos que nadie ha descubierto
en estas selvas vírgenes de América
agitan aguas dunias
que dejarán de serlo en cuanto sean vistas.

Dunia... Dunia... Dunia...

Otto-Raúl González (Guatemala, 1921-México, 2007).
alforja, Revista de Poesía, México DF. Verano 2007
(Gentileza de Cecilia Romana)

Biografía, poemas

4 comentarios:

  1. ¡Y la gentileza no fue correspondida con un pequeño y deseado libro!
    ¡Oh, poetas centroamericanos, en qué manos los dejo!
    Un saludo para ud.

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  2. Jorge...( me permito tutearlo, espero no te moleste)

    Acabo de leer su columna en la Ñ y comparto totalmente su opinion...Por que se publico la opinión de la Sra Montero? Tiene que ver acaso con que haya sido jurado del premio de novela?

    Bueno , me gusto como le "dieron" en la sección de correo de lectores!!
    Jaja
    Saludos!

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  3. Perrodinamita, al final no me tuteas...
    Claro que no me molesta que lo hagas.
    En cuanto a tu pregunta, la columna se publicó porque se le había pedido, no sé si estuvo bien o mal hacerlo(publicarla, no pedirla) pero así finalmente se resolvió.
    Personalmente creo que como digo que fue descortés inferirle a la revista esa diatriba. En su lugar, habría declinado escribir, ya que hacerlo era cuestionar directamente la publicación del cuento y en ese caso, como columnista invitada, la columna se convierte en una provocación a los invitados. Es cierto que uno se expone a eso cuando pide una columna, son las reglas del juego. Dentro de esas reglas, cabe también responder.
    Gracias por tu comentario y adelante con tu buen blog

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  4. NO te tuteo por que estaba esperando que me autorizes!
    jajaa

    ahora que me diste la luz verde lo hago...
    cosas del pago chico viste...
    desde catamarca saludos!

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